Si, con su regreso, el cáñamo lucha por reconquistar aquellos sectores que en el pasado lo convirtieron en la reina de las materias primas en Italia tanto en la producción de papel como en cordelería y tejidos, la verdadera revolución es el redescubrimiento de su uso en el campo culinario.
Los libros de cocina históricos dan testimonio de que el cannabis se ha utilizado como alimento durante siglos, ya que es nutritivo y beneficioso.
Contenidos
El redescubrimiento del cáñamo

Hoy el redescubrimiento del cáñamo nacional en la cocina es sin duda una tendencia, común incluso más allá de la frontera, que lo ve como el protagonista de los recetarios (entre otros, “La revolución del cáñamo” de Chiara Spadaro y “La marihuana en la cocina” de Marley Cedella. ). Cada vez escuchamos a más chefs que eligen el cannabis como ingrediente principal de menús muy originales por su sabor, valor nutricional y efectos beneficiosos. Además de las cervezas artesanales de cáñamo ya consolidadas, hay nuevas combinaciones con comidas clásicas o tradicionales que son protagonistas de eventos (Pikkanapa, el festival gastronómico dedicado al cáñamo y la guindilla), experimentos e ideas de negocio (cannabis y carasau: un todo -Reto de Cerdeña).
En 2009 el Ministerio de Salud reconoció el uso alimentario de semillas de cáñamo sativa y sus derivados.
Las semillas, enteras o peladas para comer crudas o cocidas, en ensaladas o en masa, son muy proteicas.
De las semillas se obtiene una harina sin gluten y un aceite rico en vitaminas y sales minerales.
Finalmente, las decocciones e infusiones preparadas con las hojas e inflorescencias tienen propiedades relajantes musculares debido a la presencia de CBD.