Una práctica ancestral, utilizada en todo el mundo para mejorar la producción agrícola, la poda consiste en la eliminación de ramas, hojas y yemas superfluas, con el fin de estimular la planta concentrar todas sus energías hacia un desarrollo óptimo.
De hecho, si se deja crecer libremente, cualquier planta y, por lo tanto, ¡también el cannabis! – Tiende a crecer demasiado y de forma inorgánica, sin satisfacer eficazmente todas sus necesidades energéticas.
En ausencia de un control adecuado por parte del cultivador, por lo tanto, una situación de este tipo conduciría inevitablemente a desarrollo de numerosos cogollos pequeños. Una planta no suspendida, que se desarrolla de forma aleatoria y desequilibrada, consume la mayor parte de la energía para sostener toda la estructura, sin tener la posibilidad de concentrarse en los cogollos apicales.
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Poda de cannabis, ¡porque no debes subestimarla!
En resumen, al margen de las pocas consideraciones que hemos tenido la oportunidad de abordar al comienzo de este análisis en profundidad, ya debería quedar bastante claro cómo el cultivador que no se dedica de manera competente a poda de cannabis, corre el riesgo de tener muchos cogollos pequeños!
En contraste, elóptimo solo puede consistir en producir unos pocos cogollos grandes, con un rendimiento global mucho mayor. Hablamos sobre “arte de podar“No por casualidad: esta técnica presupone el conocimiento de numerosas nociones, de cuya sinergia depende el resultado final.
También hay que tener en cuenta que, siempre que un vegetal se ve privado de una parte del mismo, reacciona a nivel hormonal, limitando su crecimiento como mecanismo de defensa. Por tanto, es necesario que el cultivador tenga todas las habilidades necesarias para no estresar la planta privándola de partes vitales, o demasiado grandes, pero que sea capaz de mantener el equilibrio adecuado en la cobertura de cannabis.
A poda agresiva de marihuana de hecho, es la principal causa de desarrollo inadecuado de la planta que ya no posee la fuerza vital para desarrollarse. En algunos casos, una técnica incorrecta puede incluso provocar la muerte de la planta. Por otro lado, incluso una poda demasiado ligera, y por tanto ineficaz, no aporta ninguna ventaja para el desarrollo vegetativo del cannabis.
En este estudio en profundidad, por lo tanto, intentaremos compartir parte de la información principal que le permitirá obtener un desarrollo coherente de su planta, tratando de manera integral términos como supercultivo de cannabi, sobre cómo podar una planta o cortar una planta de cannabis. .
Etapas de la poda de cannabis
El prerrequisito fundamental para realizar correctamente esta técnica, que podría conducir a una mejor cosecha de cannabis, es podar la planta solo en crecimiento vegetativo ya que durante la floración se agotaría la energía necesaria para producir las flores. Como consecuencia, tendrían unas dimensiones especialmente reducidas y, por tanto, casi inutilizables.
El procedimiento debe realizarse con un margen mínimo de tres días desde la floración, para permitir que la planta recupere su fuerza.
Antes de proceder a la poda, también siempre es recomendable realizar un cuidadoso análisis global de la planta para evaluar qué ramas darán mejores resultados y luego cortar las menos expuestas a la luz o con mayor longitud internodal.
Al intervenir en estas ramas (proceso de “desramado”) se estimula la potencia general del cannabis, siempre que el corte sea limpio, preciso y muy limpio, para minimizar el estrés de la planta.
Alternativamente, puede continuar con el defoliación, consistente en la eliminación de las hojas menos frondosas; durante esta fase no debemos exagerar ya que un proceso demasiado agresivo suele ser responsable del deterioro de la verdura.
Al cortar los elementos dispuestos bajo la etapa de hoja superficial, es aconsejable no alterar demasiado la estructura general de la planta para no desequilibrar las conexiones funcionales.
Que es el topping
Entonces, tratemos otra fase que es particularmente necesaria para la poda, la llamada Adición (o cobertura).
La cobertura implica la eliminación de la parte apical del tallo principal de la planta, para estimularla a distribuir mejor sus energías en nuevas ramas dispuestas en la parte superior del tallo.
El desmoche es una técnica que realiza dos tareas fundamentales: por un lado empuja a la planta a distribuir sus energías a nivel de dos nuevas ramas apicales y por otro lado anima a las inferiores a desarrollarse con mayor fuerza.
La principal ventaja es obtener mejores rendimientos. Por otro lado, gracias a esta técnica, la planta tiende a crecer más fuerte y tupida que vertical, lo que ayuda a mejorar su productividad.
La cobertura de cannabis También se considera el método ideal incluso para aquellos que no tienen demasiado espacio y, por lo tanto, no podrían manejar ejemplares demasiado altos.
Dicho esto, al final del párrafo, te recordamos que para podar adecuadamente el cannabis debes respetar la regla de cortar el ápice del tallo principal a nivel del último entrenudo completamente desarrollado o en plena fase vegetativa. Para obtener los mejores resultados, generalmente es necesario calcular al menos 2 semanas más sobre el tiempo total de cultivo.
Requisitos de poda de cannabis
Entonces, procedamos con otro paso fundamental para tener una mejor conciencia de la poda de cannabis: comprender cuáles son los “requisitos” básicos que te permitirán abordar este proceso con la atención y la dedicación adecuadas.
Respecto al problema de poda de cannabissin embargo, existen opiniones encontradas que hacen muy difícil abordar el tema de manera completa.
Algunos cultivadores la encuentran una técnica extremadamente beneficiosa para la producción final. Otros prefieren en cambio optar por un crecimiento natural sin intervenir. Por otro lado, según recuerdan, el cannabis ha crecido y se ha desarrollado durante milenios sin que el hombre intervenga de ninguna manera en su desarrollo. Entonces, ¿cuál es la verdad?
En general, actualmente la mayoría de los productores orientado al uso de la poda para optimizar los rendimientos de producción. ¡Y no podríamos estar más en desacuerdo!
La fase vegetativa
Dicho esto, el principal requisito para realizar una correcta poda es intervenir durante la fase vegetativa de la planta, no antes de que haya alcanzado los 30 centímetros de altura. En general, siempre es mejor llevar a cabo un enfoque minimalista, limitándose a eliminar algunos elementos, ya que intervenciones demasiado invasivas tienden a empobrecer la planta con consecuencias bastante arriesgadas.
Sería una buena idea esperar unas semanas a que las plantas crezcan libremente antes de intervenir con la poda para evaluar las distancias internodales así como el desarrollo de las ramas laterales.
El procedimiento a seguir
Otro requisito indispensable para mejorar el rendimiento de las plantas lo representa el procedimiento a seguir, que consiste en eliminar las ramas inferiores para mejorar la circulación del aire en las áreas basales de la plantación.
Cuantas más ramas bajas se eliminen, mayor será el desarrollo de las partes apicales. Sin embargo, es necesario no cortar más del 30 – 40% de ramas y hojas para no limitar excesivamente la fotosíntesis de clorofila, de cuya eficacia depende el desarrollo del cannabis.
Una reducción demasiado marcada de la fotosíntesis podría causar un impacto severo a la planta. Durante la floración del cannabis, no se recomienda en absoluto cortar ramas y hojas porque el estrés al que estaría sometida la planta podría ser muy arriesgado.
Incluso la defoliación debe limitarse a la eliminación de elementos amarillentos o secos, que podrían sombrear los de abajo limitando su desarrollo. En todos los casos es fundamental eliminar todos los elementos en malas condiciones sanitarias, ya que las hojas amarillentas o arrugadas representan el sustrato ideal para el desarrollo de parásitos y todos los gérmenes patógenos de la planta.
Métodos de poda de cannabis
Hacer un poda adecuada de cannabis, el medio más adecuado está representado de pequeñas tijeras de podar, cuyas hojas deben ser delgadas y afiladas para hacer cortes limpios y limpios.
Los cultivadores deben prestar especial atención a no involucrar partes de la planta adyacentes a la que se eliminará con el corte, manteniendo un ángulo de 45 grados con respecto al tallo principal.
Para quitar las ramas inferiores de la planta, el técnica de piruleta, que consiste en pellizcar las puntas apicales entre los dedos.
El supercultivo
Otro método bastante extendido es el de supercultivo, destinado a dar forma a las plantas y obtener cosechas más abundantes. Esta técnica es muy invasiva y provoca mucho estrés en la planta, cuyo objetivo es estimular una respuesta defensiva del cannabis, que reacciona produciendo mayores rendimientos.
De hecho, el mecanismo de acción de esta poda se basa en el supuesto de causar un daño capaz de generar una respuesta hormonal particularmente incisiva. A diferencia de otros métodos de poda, este nunca se puede aplicar durante las primeras etapas del crecimiento del cannabis o incluso durante la floración. El supercultivo tiene aspectos similares a los del topping, ya que favorece una mejor distribución de las auxinas.
Poda de aireación
Entre otras técnicas, también hacemos una breve mención a poda de aireación, que se aplica sobre las raíces de las plantas e implica el uso de macetas particulares (airpots), que garantizan una mejor circulación del aire entre las raíces, para evitar su excesiva compacidad.
Este es un método muy eficaz que, sin embargo, la mayoría de los cultivadores no utilizan, quizás porque implica mucha experiencia.
El aderezo
El desmoche es una técnica de poda muy utilizada por su sencillez y el tipo de resultados que se obtienen. Consiste simplemente en retirar la parte superior o la rama apical de la planta: de esta manera las dos yemas dispuestas debajo del corte se desarrollan de forma independiente, dando vida a dos nuevas puntas apicales, redistribuyendo también sus componentes hormonales y desarrollándose de forma más rigurosa.
Después del desmoche, el cannabis presenta una estructura más espesa y menos desarrollada en altura, lo que permite un rendimiento final optimizado. El único inconveniente de esta técnica está relacionado con el hecho de que las plantas tardan al menos una semana en recuperarse del choque y así alargar su período de crecimiento vegetativo.
El adelgazamiento de las ramas
Otra técnica de poda que ofrece resultados decididamente ventajosos es la de adelgazamiento de las ramas inferiores, para realizar siempre durante la fase vegetativa. Hay que tener mucho cuidado de no ralear demasiado la planta para no estresarla y dificultar su crecimiento.
El fimming
La técnica fimming es una variante del topping y consiste en la eliminación del 75% del extremo apical de la cima, que por tanto no se elimina en su totalidad. El método se puede hacer con tijeras o pellizcando con los dedos. Como consecuencia de esta técnica se produce el desarrollo de cuatro o más ramas apicales en lugar de las dos tradicionales que se obtienen de un desmoche total; por tanto, las ventajas son considerables.
Beneficios de la poda de cannabis
El principal objetivo de todo cultivador de cannabis es obtener el mejor rendimiento del cultivo; para lograr este propósito son necesarias algunas condiciones que incluyen el tipo de medio de cultivo, la cantidad de luz y oxígeno y el tipo de riego.
En este sentido, la poda se puede catalogar como una técnica cuya finalidad es precisamente aumentar la producción de marihuana; El principio fundamental en el que se basa este método es exponer la planta a la luz lo máximo posible para permitir que los cogollos se desarrollen de forma óptima y más rápida.
Independientemente de los métodos utilizados, el objetivo que todo cultivador se fija es ayudar a que la planta crezca mejor, desarrollándose de forma equilibrada y maximizando la función de la clorofila, evitando intervenciones demasiado agresivas que puedan estresar la planta.